¿El kennel es bueno o malo?

Como humano, pensar en estar encerrados en una jaula se nos hace horrible. Sin embargo, en el mundo de los educadores de perros hay dos puntos de vista respecto al kennel:

  1. Kennel bueno: pieza fundamental del entrenamiento y, eventualmente, su guarida.

Para muchos entrenadores, utilizar el kennel de una manera adecuada (y nunca como castigo) genera un espacio personal para que nuestro mejor amigo pueda descansar. Es más, para muchos, esto es lo más amoroso que se puede hacer, ya que, con el entrenamiento adecuado, su kennel se convierte en una guarida feliz. Además, es ideal cuidar la seguridad de tu nuevo amigo en los momentos en los que no puedes supervisarlo adecuadamente mientras se adapta a su nuevo hogar.

El kennel también se recomienda para aprender a hacer del baño afuera, claro, siempre debe combinarse con paseos y salidas frecuentes para ir al baño. Eso sí, nunca deberías dejar a tu peludo en el kennel por periodos prolongados, con excepción de la noche, cuando todos los humanos duermen.

Además, siempre hay que buscar el kennel de mejor calidad y el adecuado para el tamaño de nuestra mascota. Para evitar accidentes, nunca debemos dejar a nuestra mascota con su collar mientras está dentro de su kennel, ya que puede quedarse atorado; tampoco debemos dejarlo con juguetes que podría morder de más, y con ello, volverse peligrosos para él o ella.

  1. Kennel malo: como castigo.

Otros educadores prefieren el entrenamiento, la socialización y la libertad en casa. Para ellos, el kennel es una jaula que usan los humanos para no cuidar adecuadamente a sus peludos y que no abona al bienestar de nuestro mejor amigo.

Exponerlos a largas horas de confinamiento puede alargar o complicar el proceso de adaptación y familiarización del perro con su nuevo hogar. Es mucho más recomendable que desde el día de su llegada nuestro amigo cuente con entrenamiento interactivo que promueva y enseñe a los guardianes a comunicarse mejor para que nuestros peludos no tengan comportamientos destructivos en el hogar. Además, cuando hablamos de cachorros, es normal que durante unos meses vivamos con accidentes en casa, hasta que se desarrollen todos sus órganos.

Por otro lado, si van a pasar largos periodos de tiempo solos, deberían tener un espacio seguro en el que tengan acceso a agua, un lugar para hacer sus necesidades, así como a otros elementos básicos para su bienestar y asegurarnos de que no haya objetos a su alcance que puedan romper, tragarse o presentar un peligro para nuestro peludo.

Para los humanos que deben irse al trabajo, se recomienda buscar que una persona lo cuide y juegue con él o ella, o buscar un lugar en donde nuestro peludo pueda reducir su aburrimiento, moverse libremente y tener acceso a zonas para ir al baño.

¿Tú qué opinas? ¿Tú qué haces en casa con tu peludo?

Sin duda es estresante dejar a nuestro peludo solo y esos primeros meses de adaptación en casa requieren de mucha paciencia, pero al final, amamos a nuestras mascotas y hacemos lo mejor que podemos para cuidarlos y darles lo mejor.

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